Cerebro y lenguaje en el bebe (RMf)

Cerebro y lenguaje en el bebe (RMf) por raulespert

Este es un video donde se muestra un experimento sobre el lenguaje de los bebes, realizado por la Dra. Lucie Hertz-Pannier (Pediatra, Hospital Necker-Enfants Malades), donde los resultados en imágenes funcionales de las zonas que estaban activas durante la experiencia son: Que en los más pequeños, que carecen de un lenguaje y no tienen un vocabulario ni gramática, las regiones que tratan del lenguaje se manifiestan tal y como pueden entenderlo ellos, es decir, solo por su sonoridad. Son las mismas que lo harán en la persona adulta mucho tiempo después. Y el Prof. Fred Genesse (Psicología, Universidad Mc Gill, Montreal) agrega que: Está demostrado que antes incluso del nacimiento, cuando aún no es más que un feto, el bebé ya empieza a establecer las bases del lenguaje, y una vez que nace se adapta al idioma que oye a su alrededor.

El video comienza con la Dra. Lucie Hertz-Pannier (Pediatra, Hospital Necker-Enfants Malades) hablándole a una bebé (Lovelien): Cucú. ¿Qué te pasa? ¿Qué te pasa? Hola. Estas fascinada, ¿verdad? No vamos a hacerte creer cualquier cosa. Por supuesto que es especial.


¿Qué parte desempeña lo innato en el funcionamiento del cerebro del bebé? Durante siglos tuvimos que limitarnos a imaginar el cerebro en el interior del cráneo, hoy podemos verlo en acción.


Dra. Lucie Hertz-Pannier (Mientras lleva a la bebé hacia el scanner): Ven aquí, especie de bebé. Vamos. Qué bonita eres.


No hace mucho que estas técnicas totalmente indoloras pero aún reservadas esencialmente a los investigadores se aplican a la observación del cerebro del recién nacido.


Dra. Lucie Hertz-Pannier: Si realizamos una IRM de un niño y sabemos observar su cerebro cuando hace un determinado número de movimientos con la mano o cuando escucha palabras, podemos comprobando las modificaciones del flujo sanguíneo saber que parte del cerebro está funcionando, donde se encuentran los puntos donde se ordenan tal o cual acción, como escuchar, ver, hablar, oír, moverse.


En este caso, el experimento gira en torno al lenguaje, hace casi 50 años se plantea un extenso debate científico con el objetivo de averiguar si el cerebro de los más pequeños, es un conjunto escasamente organizado, en el que las redes se instalan de forma progresiva con la experiencia o si por el contrario, todo está ya preestablecido de algún modo desde el nacimiento.


Los investigadores le cuentan una historia a la pequeña Lovelien de tan solo 12 semanas, para determinar a que zonas de su cerebro recurrirá durante la escucha.


(Cuento) En bicicleta Lucas ya no teme al viento, y cuando esquía ya no tiene frio en los ojos. Ni siquiera cuando patina sobre ruedas olvida Lucas sus gafas. Y si ahora las lleva como debe, cuando sea mayor, no las necesitará.


Dra. Lucie Hertz-Pannier: Estos son los resultados en imágenes funcionales de las zonas que estaban activas durante la experiencia. Y que se encuentran principalmente en el hemisferio izquierdo. Las imágenes muestran que en los más pequeños que carecen de un lenguaje, que no hablan y no tienen un vocabulario ni gramática, las regiones que tratan del lenguaje tal y como pueden entenderlo ellos. Es decir, solo por su sonoridad. Son las mismas que lo harán en la persona adulta mucho tiempo después.


Dra. Lucie Hertz-Pannier (Hablándole a la bebé y su madre): ¿Ha estado bien? ¿Te ha gustado? Gracias por venir señorita. Y gracias también a mamá.


Al final, el Profesor Fred Genesse (Psicología, Universidad Mc Gill, Montreal) culmina diciendo: Los niños poseen la capacidad neurológica de desarrollar un lenguaje desde su concepción, desde la formación del feto, pero se trata de una actitud muy general, no es específica de ese aspecto en particular, por lo que en realidad buena parte del lenguaje ha de aprenderse. Los niños comienzan a ejercitar esa capacidad innata que tienen muy temprano. Está demostrado que antes incluso del nacimiento, cuando aún no es más que un feto, el bebé ya empieza a establecer las bases del lenguaje, y una vez que nace se adapta al idioma que oye a su alrededor. En otras palabras, la adquisición del lenguaje no comienza después del parto, sino antes, pero no es el lenguaje lo que es innato, sino la aptitud para desarrollarlo.


Reseña de Diego Fernández